Tarragó Ros, "El Rey del Chamamé", nació el 19 de junio de 1923 en Curuzú Cuatiá, Corrientes. Comenzó con piano, armónica y acordeón, y antes de los diez años ya giraba por la provincia.
Fundó un estilo propio, con la verdulera como sello. Su forma de interpretar marcó a generaciones y fue influencia directa de muchos conjuntos actuales.
Fue el más premiado entre sus colegas: discos de oro, platino y un apodo que lo dice todo. Su legado sigue vivo en artistas como Juancito Güenaga y su hijo Antonio Tarragó Ros, aunque con matices distintos.
"Curuzucuateño", "Tirabuzón", "Camino al arenal", "Granja San Antonio" y "Madrecita" son algunos de sus clásicos. Su versión de "El Toro" es una de las más escuchadas.